¿Quién es Dios Realmente?
He aquí la descripción de Dios y de los
unicornios —incluida una de las miles
de millones de imágenes que representan
a la ENERGÍA CREADORA—, para ver un
unicornio, simplemente ponte frente a uno
cualquiera de tus hijos, más adelante
te explico la razón.
Te advierto que la
siguiente respuesta no es apta para
cualquier fanático de trivialidades,
individuos esos que piensan que
porque andan erguidos ya se creen
evolucionados, esos que encajan
perfectamente en la descripción
de:indoctos, zopencos, bodoques,
borregos; etc., etc.
Lo digo porque
en esta red de gente informada y
buena, lamentablemente también
nos acompañan individuos que ofenden
“a priori”, porque no poseen la capacidad
de imaginar la respuesta que muchas veces
somos capaces de dar respecto a determinadas
situaciones y cuestionantes —esto va por uno
de tus amigos, que debido a su temprana
estupidez sólo llegó a rebuznar un comentario
propio de aquellos que no saben lo que es el
razonamiento—.
He aquí la descripción que corresponde al complejo
retrato de Dios y la diversidad gráfica que puede
representar el concepto, similar atención le doy al
“unicornio. Como sabes —porque ya lo hemos discutido—,
Dios es un concepto abarcador de TODO, es entonces
la FUENTE y ENERGÍA que llena el vasto universo, Dios
es el Universo, pero para acercarnos más íntimamente
a su abarcadora imagen, sí, abarcadora porque esa energía
lo es todo: el aire, el agua, el suelo que pisamos, la vegetación,
las nubes, el cielo, los planetas, las estrellas o soles, los animales,
eres tú, sí, tú, o sea eres Dios, por eso puedes crear cosas
aunque no creas en esa "entidad, y eso lo haces porque eres
un ser empoderado por la Energía cósmica a la que le hemos
puesto como nombre DIOS, por ser una energía, no tiene
forma única, él es todas las formas, además de ser intemporal,
es omnipresente, por eso está en todas partes, por eso él es
EL TODO.
Es concepto y objeto, es lo que existió, lo que existe
y lo que existirá, y puede serlo porque su condición de
intemporalidad se lo permite; él es la noche y el día, la
luz y las sombras, es la nube y el agua que cae como
lluvia, pero también él es todo aquello que se moja con
la lluvia; él es río que fluye alegre entre las rocas
susurrándole a los árboles mientras el viento le
acompaña cantando y esparciendo aromas, pero
también él a la vez el viento y los árboles, y por
supuesto, es la montaña que amorosamente pare
al río. Dios es todo eso y todo lo demás, por ejemplo,
él es cada animal que puebla los bosques, es el ser
humano representado por todas las razas y sexos.
Dios es el amor universal. Nosotros…
Tú y yo, y todos los demás somos Dios.
Sobre el unicornio debo decirte que es un concepto que
constantemente se hace realidad en una multiplicidad de
manifestaciones, entonces, ¿qué es un unicornio, te
preguntarás? Los unicornios son las aspiraciones, deseos
y sueños que perseguimos y nos mantienen vivos, me explico:
Recuerdo cuando en mis años de adolescencia imaginé tener
una familia, tener hijos, y esos deseos-sueños-aspiraciones-
los fui acariciando en mi mente hasta que con el tiempo pudieron
ser realidades que hoy me hacen sentir satisfecho y pleno, porque
siempre los acaricié, incluso antes de hacer que se materializaran,
entonces, amigo Rolando, ellos no sólo son mis hijos, son también
mis tres unicornios que se materializaron con cuerpo de humanos,
hay múltiples formas para los unicornios...múltiples, pero prefiero
dejarlo a tu imaginación.
Este texto descriptivo te lo acompaño con una de muchas
imágenes que representan a LA FUENTE, LA ENERGÍA
CÓSMICA o DIOS, como muchos le dice. Apreciado amigo,
“Quien tenga ojos para ver, que vea”.
Si aún así no puedes ver la imagen de Dios,
te recomiendo que te des el tiempo necesario
hasta que llegue el amanecer...tu amanecer.
En el momento menos pensado sé que saldrás
de la oscuridad en la que permaneces aunque
tengas tus luces.
Sólo cuando logres comprender su esencia,
comprenderás, por ejemplo, por qué el sufrimiento
es tan necesario como el placer. Eso sí, para conocerlo,
por favor, nunca te auxilies de dogmas absurdos, ni de
religiosos tradicionales, la vía idónea es conversar con
uno mismo, con nadie más, porque esa ENERGÍA que
da vida a todo está a ninguna distancia de ti…está en ti,
porque también tú eres Él. ...
Eres Dios.
— FERNELY LEBRÓN.
